Frasecillas sobre personas con formación facial ligeramente defectuosa.

Muahahaha, temblad mortales, pues a Petrum le ha venido la moda de las frases sobre feos! Esquisdedé (las D's mayúsculas)

Erase una vez un tio tan feo que cuando nació, el doctor le dio el cachete en la cara.



Erase una vez, un tio tan feo, que cuando nació no lloró él, ¡lloró el doctor, su madre y la comadrona!



Erase una vez un tio tan feo que, tras nacer el feucho, el doctor fue a la sala de espera y le dijo al padre "Hicimos lo que pudimos... pero nació vivo".


Erase una vez un tio tan feo que su mamá no sabía si quedarse con él o con la placenta.


erase una vez un tio tan feo que, tras nacer prematuro le metieron en una incubadora con vidrios tintados.


Erase una vez un tio tan feo que su madre no le daba el pecho, le daba la espalda.



Erase una vez un tio tan peludo que a su madre siempre le preguntaban:
"Señora, a su hijo ¿lo parió o lo tejió?"

Erase una vez un tio tan feo que su padre llevaba en su billetera la foto del niño que venía cuando la compró.

Erase una vez un tio tan feo tan feo, que, de pequeño, sus padres le daban de juguetes para la bañera una radio y un tostador eléctrico.



Erase una vez un tio tan feo que cuando jugaba al escondite nadie le buscaba.

Erase una vez un tio tan feo que cuando se perdió, de pequeño. Le preguntó al policía si creía que íban a encontrar a sus padres.

Le contesto: "No lo sé; hay un montón de lugares donde se pudieron haber escondido".



Erase una vez un tio tan feo que le exhibían en una feria por teléfono.



Erase una vez un tio tan feo que hacía llorar a las cebollas.



Erase una vez uno tan flaco, que para hacer sombra tenía que pasar dos veces por el mismo lugar.


Erase una vez un tio tan feo, que sus padres tenían que atarle un trozo de carne al cuello para que el perro jugara con él.


Erase una vez un tio tan feo que un día tiró un boomerang y éste no regresó nunca mas.

Erase una vez un tio tan feo que cuando le secuestraron, los secuestradores mandaron un dedo suyo a sus padres para pedir recompensa.
Su madre les contestó que quería más pruebas.


Erase una vez un tio tan feo que, Trabajando en una veterinaria la gente no paraba de preguntar cuánto costaba él.


Erase una vez un tio tan feo que cuando se iba a suicidar tirándose desde la terraza de un edificio de 50 pisos, mandaron a un cura a darle unas palabras de aliento. Sólo dijo: "En sus marcas, listos..."

Erase una vez un tio tan feo que el último deseo de su padre antes de morir era que se sentara en sus piernas. Lo habían condenado a la silla eléctrica...


(Algunas son muy malas, pero las lees una detrás de otra y es un dejocones xD)